Serie | “El comunismo intenta destruir Estados Unidos”
Preludio: Existe este gran Estados Unidos
Existe esta maravillosa tierra en el planeta Tierra, con aire limpio, cielos azules, agua abundante, flores y animales corriendo, con rastros de signos humanos que se remontan a decenas de miles de años.
Está esta maravillosa tierra a la que Cristóbal Colón y otros exploradores europeos llegaron en la década de 1490 y llamaron al continente el “Nuevo Mundo”.
Esta maravillosa tierra donde los residentes nativos compartieron su comida para ayudar a los nuevos colonos a pasar su primer invierno, y a cambio los colonos organizaron una ceremonia de cosecha al año siguiente, comenzando la tradición del “Acción de Gracias”.
Esta maravillosa tierra que personas de diferentes religiones, razas y antecedentes culturales admiran y donde han llegado por su libertad y nuevas oportunidades, creando lo que llamamos un “crisol de culturas”.
Existe esta maravillosa tierra de donde salió Neil Armstrong para poner su pie izquierdo en la superficie lunar diciendo: “Ese es un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad”.
Existe esta tierra maravillosa donde siguen surgiendo tantos inventos e innovaciones que cambian continuamente el mundo para el bien de todos, incluida la electricidad, el teléfono, el automóvil, el avión, Internet, las redes sociales y el mapa del genoma humano.
Existe este maravilloso país que el patriota Nathan Hale dijo: “Solo lamento tener una vida que perder por mi país”.
Existe este maravilloso país sobre el cual Patrick Henry declaró: “Dame la libertad o dame la muerte”;
Existe este maravilloso país que nuestros Padres Fundadores de Estados Unidos (George Washington, Thomas Jefferson, Benjamin Franklin) establecieron, después de una Guerra Revolucionaria de ocho años, con la estructura de un sistema de democracia, libertad, separación de poderes y controles y contrapoderes, que el mundo entero envidiaba.
Existe este maravilloso país que se arraigó sólidamente sobre la base del “gobierno del pueblo, por el pueblo, para el pueblo”.
Existe este maravilloso país que se erigió como un ‘Faro para el Mundo Libre’, inspirando a las personas con los valores de humanidad, libertad, respeto mutuo e integridad.
Está este maravilloso país que erigió la Estatua de la Libertad en el río Hudson, sosteniendo una antorcha para iluminar el camino para las personas que vienen a buscar la libertad.
Existe este maravilloso país que imprimió en su moneda “En Dios confiamos”.
Está este maravilloso país que soportó un gran sufrimiento para mantener la Unión y abolir la esclavitud, y al final, curó su profunda división y sus trágicas heridas nacionales.
Está este maravilloso país que envió a millones de sus hijos e hijas durante las guerras mundiales y las guerras posteriores para defender la paz y la libertad y detener el genocidio.
Está este maravilloso país que se enfrentó a la ex Unión Soviética comunista y, a través de esfuerzos persistentes e incansables, llevó al “Imperio del Mal” a su desaparición.
Existe este maravilloso país que siempre defenderá los derechos humanos en todo el mundo, promoverá los valores universales y hablará en nombre de la gente cuando sus gobernantes los privan de sus derechos.
Existe este maravilloso país que siempre defenderá los derechos humanos en todo el mundo, promoverá los valores universales y hablará en nombre del pueblo cuando sus gobernantes los privan de sus derechos.
Sin embargo, a partir de 2020, varias catástrofes azotaron a este país y trataron de destruir su grandeza:
La pandemia de COVID-19 puso en peligro la seguridad sanitaria del país.
Las medidas de cierre encaminadas a detener la propagación del virus ponen en peligro la economía del país.
Las lamentables muertes de afroamericanos y la agitación social durante el movimiento Black Lives Matter pusieron en peligro la ley y el orden de la nación.
La decisión de rechazar a las figuras históricas de nuestro país, incluidos nuestros Padres Fundadores, puso en peligro la historia y el patrimonio de la nación.
Las elecciones disputadas por el fraude dividieron aún más a la nación en dos grupos hostiles, poniendo en peligro la Constitución de la nación y la legitimidad de gobierno del presidente.
Mis compatriotas estadounidenses:
¿Dejaremos que estos desafíos derrumben a nuestro país o seremos capaces de curar nuestras heridas, reunir a nuestro país y recuperar nuestra grandeza?
¿Seremos capaces de usar el amor en lugar del odio, la racionalidad en lugar de los prejuicios y la paz en lugar de la violencia para trabajar juntos?
¿Podremos volver a nuestras tradiciones, a nuestros valores, a lo que nuestros Padres Fundadores nos dejaron, para salvaguardar nuestro sistema y defender nuestra gran América?
¿La respuesta? Si.
Porque hay personas justas en esta tierra que nunca han olvidado su Juramento de Lealtad: “Prometo lealtad a la Bandera de los Estados Unidos de América, y a la República que representa, una Nación bajo Dios, indivisible, con Libertad y Justicia para todos”.
Porque hay personas justas en esta tierra que sobrevivieron el trágico ataque terrorista del 11 de septiembre y regresaron aún más fuertes, mientras conservaban su racionalidad y continuaban abrazando a la comunidad musulmana que vivía pacíficamente en este país en lugar de discriminarlos.
Porque hay personas justas en esta tierra, incluidos miles de voluntarios de médicos y enfermeras, de todo el país, quienes, cuando el nuevo coronavirus devastó la ciudad de Nueva York y los seres humanos aún no sabíamos cómo combatirlo, llegaron a Nueva York para salvar la vida de otras personas mientras arriesgan la suya propia.
Porque hay gente justa en esta tierra que permanece en paz cuando sale a la calle a expresar sus opiniones a pesar de que otros grupos recurren a la violencia y los disturbios.
Porque hay personas justas en esta tierra que, cuando enfrentan calamidades, nunca titubean en sus oraciones y creencias: ¡Dios bendiga a Estados Unidos de América!
Mis compatriotas estadounidenses:
¡Trabajemos juntos para recuperar la gloria de esta gran América! Cuando comencemos con este honorable esfuerzo, primero entendamos: muchos de nuestros desafíos están relacionados con la agresión del comunismo, a través de su influencia ideológica e infiltración táctica, con el intento de destruir nuestro sistema; y ese ataque no comenzó en 2020, ha estado sucediendo durante muchos años.
La serie de “El comunismo intenta destruir Estados Unidos” fue publicada originalmente en China Scope.
