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China: El peligro del masivo proyecto de cambio climático del PCCh

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Información relacionada con el calentamiento global o cambio climático empezó a usarse en los años 50, al principio de manera esporádica y poco a poco fue tomando fuerza, hasta ser algo universalmente aceptado hoy en día.

El calentamiento global denuncia el impacto del humano moderno en el clima, un impacto negativo que gradualmente cambia el clima de nuestro planeta.

Sin embargo, varios medios anunciaron que el gobierno chino acelerará sus proyectos para modificar el clima y los patrones climáticos y así generar lluvia – o la ausencia de – a voluntad del Partido Comunista Chino (PCCh). Gobiernos y organizaciones preocupados por el cambio climático no se han pronunciado acerca del proyecto de manipulación climática de Pekín que forzaría grandes cambios climáticos de efecto inmediato, con consecuencias impredecibles.

Este anuncio ha pasado largamente desapercibido por lo medios de comunicación generalistas, con la excepción de India, donde el temor de que el PCCh use el proceso como un arma ha hecho saltar las alarmas. India tiene fundamentos de peso para temer su uso militar después de la escalada de tensiones en su frontera con China, donde ha habido ya conflictos locales entre India y China.

El historial del PCCh da credibilidad a su uso como un arma.

¿En que consiste el programa chino de modificación del clima?

Desde hace varios años ya existía el Proyecto Tianhe (“río del cielo”) tiene como objetivo controlar y guiar el vapor que se encuentra en el aire sobre la cuenca del río Yangtze hacia el norte del país hasta la cuenca del río Amarillo, donde se convertiría en lluvia.

Pero ahora el Consejo de Estado de China ha anunciado su plan para drásticamente expandir el sistema de modificación del clima que le permitiría controlar las condiciones climáticas. El sistema cubriría un área total de 5,5 millones de kilómetros cuadrados para lluvia artificial, que es aproximadamente 1,5 veces el tamaño de la India. No cabe duda de que modificar el clima a estas proporciones podría tener un impacto global en el patrón climatológico de impredecibles consecuencias.

Control del clima y la ingeniería social

La humanidad a lo largo de su historia se ha adaptado al clima cambiante. El clima ha estado presente en migraciones humanas e incluso el nacimiento y caída de civilizaciones desde su misma existencia.

Ahora bien, el régimen comunista de China está obsesionado con el control social. Además, China lleva ya muchos años con un creciente problema climático, lluvias intensas en una parte del país al mismo tiempo que hay sequias en la otra mitad.  Esto crea problemas económicos y hambruna, así como descontrol social, desplazamientos internos y descontento en la población.

Para el PCCh el control social es de vital importancia para su misma existencia, por lo tanto, la posibilidad de controlar el clima y su impacto en la sociedad es algo que no puede descartar fácilmente, ya que resulta realmente tentador. Una verdadera ingeniería social donde el ser humano ya no necesita adaptarse al terreno y al clima, sino que adaptamos el clima a nuestra necesidad, o bien a la necesidad del PCCh. Favorecer o castigar ciudades o poblaciones enteras resulta intervención divina, ya que ¿quien puede culpar al clima? Hay que recordar que en China hay que pedir permiso para reencarnar, ya que el PCCh se posiciona por encima de lo divino.

Cambio climático y su uso militar

China tiene muchos frentes abiertos, tales como Taiwán, India o Australia. Actúa de manera cada vez más agresiva y el riesgo de un conflicto armado se hace gradualmente más real. Además, el régimen chino ha demostrado que no le importa la opinión de la comunidad internacional de la que dice desear formar parte. Véase China en el Consejo de Derechos Humanos de ONU.

En un entorno de ‘guerra sin restricciones’ abiertamente declarado por China el uso del control climático para uso militar es una posibilidad que un analista militar no puede descartar. Y India es el único país que ha hecho sonar las alarmas, al menos de forma pública.

Finalmente, ya sabemos que nuestro planeta es un ecosistema donde cada elemento está conectado de una manera completa y a menudo difícil de predecir. Las consecuencias de un proyecto de esa magnitud, con un cambio drástico del clima en un área de tales proporciones, resulta prácticamente imposible que predecir. Se estaría poniendo el planeta en un riesgo mucho más grande que el del citado calentamiento global.

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