Hollywood está siendo usado como una herramienta de propaganda para avanzar en las ambiciones de poder blando del Partido Comunista Chino (PCCh), según un reciente informe publicado en agosto.
El grupo de derechos humanos Pen America afirma que “el reparto, la trama, los diálogos y los escenarios de las películas de Hollywood están siendo cambiados en un esfuerzo por evitar contrariar a los funcionarios chinos“.
El informe afirmó: “El Partido Comunista Chino está dando cada vez más forma a lo que el público mundial ve. Si bien todos somos muy conscientes de los estrictos controles que el gobierno chino mantiene sobre la disidencia, el pensamiento independiente y la creatividad dentro de sus propias fronteras, el largo brazo de la censura china, impulsada por vastos incentivos económicos, también ha llegado hasta lo más profundo de Hollywood, dando forma a las percepciones, inculcando sensibilidades y reconfigurando los límites de lo que se puede mostrar, decir y contar“.
Los autores del reporte aportan ejemplos de esto en los títulos la Guerra Mundial Z y Top Gun: Maverick.
El informe de PEN América, “Hecho en Hollywood, Censurado en China” afirmó que Paramount Studios se vio influenciado por Beijing para cambiar un punto de la trama de la película World War Z.
“En 2013, los ejecutivos de Paramount Studios, a instancias de China, exigieron que el diálogo en una escena de la película de zombis World War Z de Brad Pitt donde varios personajes discuten los orígenes del brote de zombis, se cambiara para que el virus no se originara en China el lugar que el material de origen de la película especificaba originalmente“, aseguró el informe.
Los censores chinos también presionaron para que se retirara la bandera taiwanesa y la japonesa de la chaqueta de Maverick en la película Top Gun.
“Incentivos para que los estudios jueguen bien con los reguladores chinos pueden ayudar a explicar por qué algunos estudios autocensuran películas que es poco probable que lleguen a los cines chinos, como Top Gun: Maverick“, dijo el reporte.
El Mulán de Disney también fue citado en el informe.
La controversia fue recientemente causada por la actriz estadounidense nacida en China Liu Yifei, también conocida como Crystal Liu, la estrella principal de la producción de Disney del año 2020, Mulan.
En agosto de 2019 Liu publicó en apoyo de la represión del gobierno de Hong Kong contra el movimiento pro democracia de la ciudad, lo que llevó a que muchos en Hong Kong llamaran a boicotear el estreno de la película debido a la alineación política de la actriz.
Sin embargo, el régimen reaccionó rápidamente emprendiendo una campaña en redes sociales bajo el hashtag #SoporteMulan.
El representante del PEN afirmó: “El movimiento #SupportMulan, respaldado por el gobierno, demuestra que incluso si los estudios de Hollywood pretenden hacer sus películas tan inofensivas como sea posible, con la definición de ‘inofensivas’ siendo muy sensible a lo que Beijing declara como ofensivo, el PCCh está más que dispuesto a imponer una agenda política en estas películas, aprovechando incluso controversias imprevistas como oportunidades para llevar a cabo su propaganda creativa, mientras que arrastra a los estudios consigo“.
Por otra parte, la elección del lugar donde se filmó Mulan, que incluye el desierto de Mingsha Shan, parte del cual se encuentra en Turquestán Oriental, bautizado por el régimen chino como Xinjiang -el lugar donde se denuncia que se encuentran los “campos de reeducación” y donde se cometen abusos de los derechos humanos contra la población uigur- fue muy criticado por los políticos estadounidenses.
La senadora estadounidense Marsha Blackburn tuiteó: “La aparente cooperación de Disney con los funcionarios del Partido Comunista Chino para filmar a Mulán es profundamente inquietante“.
Fuente: Express
21 de septiembre 2020.
