China amenazó, a través de Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores del Partido Comunista Chino (PCCh), el 19 de noviembre a los países miembros de la Alianza de los Cinco Ojos:
“Ya sea que tengan cinco o diez ojos, si se atreven a dañar la soberanía, la seguridad y los intereses de desarrollo de China, tengan cuidado de que no les saquen los ojos”.
La amenaza estaba dirigida a los países de la “Alianza de los Cinco Ojos”, y los gobiernos de los Estados Unidos, Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Reino Unido que emitieron una declaración conjunta sobre Hong Kong el 18 de noviembre reiterando su seria preocupación por la adopción por parte del Partido Comunista Chino (PCCh) de nuevas reglas para descalificar a los legisladores democráticamente elegidos de Hong Kong.
Recientemente, el Partido Comunista Chino tomó medidas para suprimir los últimos vestigios de democracia y disidencia en Hong Kong. En una purga, las autoridades privaron de sus escaños a cuatro miembros prodemocracia del Consejo Legislativo de Hong Kong, Kwok Wing-kong, Kwok Ka-ki, Leung Kai-cheong y Yeung Ngok-kiu. Horas después de que los cuatro fueran descalificados, los 15 legisladores restantes del ‘campo pandemócrata’ dijeron que renunciarían juntos.
“La acción de China es una clara violación de sus obligaciones internacionales en virtud de la Declaración Conjunta Sino-Británica, legalmente vinculante y registrada en la ONU”, dijeron los cinco aliados de habla inglesa que tienen un acuerdo para compartir información de inteligencia y técnicas para reunirla.
Gran Bretaña considera ahora que China rompió la Declaración Conjunta en tres ocasiones, incluyendo con la legislación de seguridad nacional para Hong Kong introducida este año.
Los Estados Unidos han impuesto sanciones a la Directora General de Hong Kong, Carrie Lam, y a otros funcionarios chinos por la represión y han advertido de la adopción de nuevas medidas.
La dictadura china expresó su fuerte descontento y su firme oposición a lo que consideró una flagrante violación del derecho internacional y las normas básicas de las relaciones internacionales alegando que, lo referente a Hong Kong son asuntos internos del Partido Comunista Chino, dijo Zhao Lijian en la conferencia de prensa periódica del Ministerio de Relaciones Exteriores.
“Mucha gente pensaría que hoy es un día oscuro. Permítanme decirles que no es tan difícil”, dijo Kok Ka-ki, uno de los cuatro legisladores descalificados. “Mientras nuestra determinación de luchar por la libertad, la igualdad y la justicia permanezca inalterada, los valores fundamentales que apreciamos volverán algún día”.
Desde que Xi Jinping asumió el poder, el Ministerio de Asuntos Exteriores del Partido Comunista Chino cambió su estrategia de esperar el momento oportuno y perseguir una diplomacia de “guerreros lobo” a gran escala.
De hecho, no es la primera vez que China amenazó a otro estado. Recientemente el ministro de Exteriores alemán, Heiko Mass, tuvo que poner en su lugar a su homólogo chino, Wang Yi, durante una rueda de prensa en que el diplomático chino amenazó a un senador checo con “hacerle pagar un alto precio” por simplemente viajar a Taiwán.
“Nosotros, como europeos, actuamos en estrecha cooperación (…) ofrecemos a nuestros socios internacionales respeto, y esperamos exactamente lo mismo de ellos“, dijo Maas el 1 de septiembre en una rueda de prensa de 50 minutos en Berlín junto a Wang.
“Las amenazas no tienen cabida aquí“, agregó Maas contundente.