Nueva herramienta de control de la China comunista: La moneda digital

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La China comunista está agregando otro elemento a su caja de herramientas para vigilar y controlar a su población. Ya conocido como el país del mundo con el sistema de crédito social y vigilancia más generalizado, China ahora creó una moneda digital, el renminbi o yuan digital, también conocido como Pago Electrónico en Moneda Digital (DCEP por sus siglas en inglés), para garantizar que casi ninguna transacción quede sin registrar.

A diferencia de las criptomonedas como bitcoin, que no son emitidas por los gobiernos y, por lo tanto, no pueden usarse como medio de pago en la mayoría de las transacciones cotidianas, la moneda digital china es emitida y controlada por el banco central de China.

Según informó Wall Street Journal, se espera que la moneda “proporcione al gobierno chino nuevas herramientas para controlar tanto su economía como su población. Por su diseño, el yuan digital anulará uno de los principales atractivos de bitcoin: el anonimato para el usuario”.

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“El DCEP es la antítesis del bitcoin. El objetivo final de una criptodivisa es la separación del dinero y el Estado”, dijo Stewart Mackenzie, un experto en criptodivisas con sede en Hong Kong. “Es fácil para ellos decir que es como el bitcoin cuando es un mundo aparte”.

Sin embargo, el verdadero objetivo de la nueva moneda digital parece que pretende desafiar el antiguo reinado mundial del dólar estadounidense. “China debe prepararse para una escalada en toda regla para la lucha con Estados Unidos y prepararse para desvincular gradualmente el yuan chino del dólar estadounidense”, escribió Zhou Li, exdirector adjunto del Departamento de Enlace Internacional del Partido Comunista en julio de 2020. “Al aprovechar la posición de monopolio mundial del dólar en el sector financiero, Estados Unidos representará una amenaza cada vez más grave para el desarrollo futuro de China”.

China lleva trabajando en el yuan digital desde 2014 y lo lanzó como proyecto piloto en cuatro ciudades chinas el año pasado. Desde entonces, la moneda digital se amplió a 10 ciudades y provincias que cubren a 100 millones de personas, donde el proyecto piloto se llevó a cabo en forma de loterías. En Shenzhen, por ejemplo, el gobierno regaló un total de 10 millones de yuanes (alrededor de 1,5 millones de dólares) a unas 50.000 personas, que pudieron utilizar en 3.000 comercios locales tras descargar una aplicación digital de renminbi.

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Shenzhen es la sede de algunos de los gigantes tecnológicos del país, como Huawei y Tencent; según los informes, Walmart también participó en el proyecto piloto. Otra empresa china de comercio electrónico, JD.com, como parte del proyecto, pagó a sus empleados con el yuan digital. Según se informa, también hay planes para que los atletas y visitantes extranjeros en los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 utilicen el yuan digital como medio de pago.

Recientemente, se informó que China repartirá 40 millones de renminbi (6,2 millones de dólares) de su moneda digital a los ciudadanos de Pekín en una lotería; además que está probando el yuan digital en Hong Kong, y que recientemente implementó más de 3.000 cajeros automáticos en Pekín donde la gente podrá convertir los yuanes digitales en efectivo y viceversa.

China negó que el lanzamiento del yuan digital esté plagado de objetivos ocultos, como desafiar al dólar. “Para la internacionalización del renminbi, hemos dicho muchas veces que es un proceso natural, y que nuestro objetivo no es sustituir al dólar ni a ninguna otra moneda internacional”, dijo Li Bo, vicegobernador del Banco Popular de China. “Nuestro objetivo es permitir que el mercado elija”.

“Algunos medios de comunicación extranjeros asociaron recientemente el proceso con la geopolítica, asumiendo que el Banco Popular de China (PBC por sus siglas en inglés) planeó establecer una nueva configuración financiera global mediante la emisión de DC/EP [moneda digital/pago electrónico]”, escribió recientemente el Global Times del Partido Comunista Chino (PCCh).

“Algunos incluso llegaron a la conclusión de que el gobierno chino consideró la emisión y el control de una moneda digital soberana como un ‘nuevo campo de batalla’ de la competencia nacional. De hecho, la decisión del PBC es simplemente un movimiento necesario para cumplir con la tendencia inevitable del desarrollo de la moneda mundial. Desde los objetos materiales y los metales preciosos hasta los billetes de papel y la moneda digital en el futuro, la búsqueda de pagos más sencillos y fáciles es una tendencia imparable del desarrollo monetario y financiero”.

Sin embargo, el PCCh tiene un desafortunado historial de no cumplir estrictamente sus propias promesas. En 1984, prometió que la autonomía de Hong Kong, incluidos sus derechos y libertades, se mantendría sin cambios durante 50 años bajo el principio de “un país, dos sistemas” después del retorno del territorio a la soberanía china en 1997. Sin embargo, en junio de 2020, cuando el PCCh introdujo su ley de seguridad nacional en Hong Kong, había incumplido su promesa. El PCCh sigue aplastando a Hong Kong. La semana pasada, el PCCh arrestó a Ryan Law y a otros cuatro editores y ejecutivos de Apple Daily, un periódico de Hong Kong dedicado a promover la democracia. El fundador y propietario del periódico, Jimmy Lai, de 72 años, cumple actualmente una condena de 20 meses de prisión.

El PCCh incumplió además su compromiso de 2015 de no militarizar las islas artificiales que Pekín estuvo construyendo en la cadena de las Islas Spratly, en el Mar del Sur de China, y nunca cumplió al menos nueve de los compromisos que asumió cuando se adhirió a la Organización Mundial del Comercio, por nombrar solo algunos casos. Esta lista de compromisos incumplidos ni siquiera incluye las mentiras que China dijo al mundo sobre la supuesta intransmisibilidad del Coronavirus, originado en Wuhan y que hasta ahora se cobró casi cuatro millones de vidas y asoló innumerables economías.

A pesar de las protestas del PCCh en sentido contrario, parece haber pocas dudas de que China ve su nueva moneda digital como un elemento crucial en la competencia por convertirse en la potencia tecnológica dominante del mundo: la nueva moneda digital forma parte de la ambición del PCCh, tal como se establece en su nuevo Plan Quinquenal para los años 2021-2025, de digitalizar China. La digitalización, a su vez, forma parte de la ambición de China de independizarse tecnológicamente de Occidente, dominar la tecnología mundial y superar a Estados Unidos como potencia dominante del mundo para 2049, cuando se cumpla el centenario de la Revolución Comunista de China.

El Plan Quinquenal de China menciona la tecnología blockchain:

“Fomentaremos y fortaleceremos las industrias digitales emergentes como la inteligencia artificial, el big data, el blockchain, la computación en la nube y la ciberseguridad…”

La propuesta del Comité Central del Partido Comunista Chino sobre la elaboración del XIV Plan Quinquenal menciona el “desarrollo de la moneda digital”:

“Desarrollaremos la economía digital, promoveremos la industrialización digital y la digitalización industrial, promoveremos la integración profunda de las economías digital y real, y crearemos agrupaciones de industrias digitales competitivas a nivel internacional. Construiremos un sistema de banco central moderno, perfeccionaremos los mecanismos de gestión de la oferta monetaria, promoveremos de forma segura el desarrollo de la moneda digital…”.

La nueva moneda digital china, además de aumentar el control y la vigilancia del Estado en China, así como desafiar al dólar estadounidense, podría afectar a la capacidad de Estados Unidos y otros países de imponer sanciones al gobierno chino por sus abusos de los derechos humanos y otras infracciones del derecho internacional. Según escribió Sahil Mahtani, en American Affairs Journal, recientemente:

“… una innovadora moneda digital lanzada por el banco central de China probablemente creará una red de pagos paralelos -una más allá de la supervisión estadounidense- paralizando así la política de sanciones de Estados Unidos. Este desarrollo comprometerá el poder de Estados Unidos en todo el mundo, y por lo tanto, debería atraer el interés de más de los sospechosos habituales que se obsesionan con las monedas digitales…”.

“La expansión de una moneda digital china acabará por abrir el control de Estados Unidos sobre los pagos mundiales y, por tanto, comprometerá la política de sanciones de Estados Unidos y una medida importante de su poder en el mundo…”.

“No es que la moneda digital china vaya a convertirse en el estándar de pagos dominante, pero podría convertirse en un estándar, creando un sistema paralelo con el que evitar el largo alcance de la regulación estadounidense”.

Estados Unidos, por su parte, no parece estar preparado para el desafío de China sobre el futuro del dinero. Jerome H. Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed), dijo recientemente que en esta etapa la Fed sólo estaba estudiando si existe la necesidad de una moneda digital del banco central. También dijo que los funcionarios estadounidenses sólo considerarían la emisión de un dólar digital si creyeran que hay un uso claro y si la idea tiene un amplio apoyo público y político, según el New York Times. “¿El público quiere, o necesita, una nueva forma digital de dinero del banco central para complementar lo que ya es un ámbito de pagos altamente eficiente, fiable e innovador?”, dijo Powell.

“Las autoridades monetarias estadounidenses no sólo están subestimando la amenaza que supone para el dominio del dólar la combinación pionera de moneda digital y pagos electrónicos de China”, escribió recientemente el profesor de Stanford Niall Ferguson. “También están tratando a las innovaciones financieras basadas en blockchain que ofrecen la mejor alternativa al e-yuan de China como intrusos en su propia fiesta exclusiva”.

Este artículo fue publicado originalmente en Gatestone el 27 de julio de 2021.

Autora: Judith Bergman.

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